Levengood TW, Yoon GH, Davoust MJ, Ogden SN, Marshall BDL, Cahill SR, et al. Supervised Injection Facilities as Harm Reduction: A Systematic Review. Am J Prev Med [Internet]. 2021;(July). Disponible en: https://doi.org/10.1016/j.amepre.2021.04.017
En este revisión se analizan la eficacia de las salas de consumo supervisadas. El punto de partida es que siendo ilegales en Estados Unidos varias ciudades se plantean su instalación como respuesta al creciente número de reacciones agudas al consumo.
A partir del análisis de 22 estudios -uno de ellos realizado en España- se concluye que estos dispositivos sanitarios se asocian con reducciones significativas en la morbilidad y mortalidad por sobredosis de opioides, mejoras significativas en los comportamientos de inyección y reducción de daños, mejoras en el acceso a programas de tratamiento de adicciones, sin aumentar la delincuencia o las molestias públicas para la comunidad circundante.
Aunque estos datos sean positivos, no es de esperar un cambio de legislación a corto plazo en Estados Unidos y, por tanto, una aplicación de salas en esas ciudades.
Es llamativo que en España, donde no se han declarado ilegales, solo existan en Catalunya o en el País Vasco. Es decir que la no implantación en otras áreas del territorio está impidiendo mejoras en la población que consume drogas, creando una discriminación sin ninguna base científica.