Archivo de la categoría: Apuntes para un master en drogodependencias

El castigo en los centros de atención a consumidores de sustancias no prescritas (1)

Los programas estables de proximidad en la atención de consumidores de drogas aparecen en Barcelona de la mano de Miguel de Andrés según el modelo de Anne Mino en Ginebra (2).

Las limitaciones que se proponían en los centros eran tres fundamentalmente: no tráfico de sustancias, no consumo y no violencia ni con personas ni con material del centro.

A estas principales normas se suman otros de carácter educativo. Del tipo de limpiar lo que se ha utilizado o no sacar comida fuera del centro.

Se plantea lograr el cumplimiento de las normas mediante la explicación de las mismas, directamente a las personas o mediante las asambleas de usuarios y profesionales. Propiciando un entorno no punitivo (3).

Cuando, sin embargo, las normas no se cumplen aparecen las sanciones. Que fundamentalmente son las expulsiones. Pocas veces se plantean alternativas del tipo de realización de tareas comunitarias. Se ha planteado en situaciones de dañar materiales, pero a menudo es difícil proponer un cumplimiento del calendario de tareas alternativas.

Tradicionalmente se propone que las sanciones y expulsiones no se adjudiquen en caliente. Que se proponga que la persona sancionada abandone el centro y que posteriormente, tras reunión de equipo, se comunique el alcance de la sanción.

Esto introduce el concepto de expulsión express que supone que en un determinado momento una persona abandone el centro, sin más trascendencia para los días siguientes.

Es importante que las sanciones se discutan en equipo. Y el análisis de las sanciones es un buen elemento de la calidad de la atención,

Diferentes medidas se mantienen en los centro de desintoxicación (4) y mantenimiento con metadona (5) y otras más generales (6-8)

Centrar la actuación en casos de violencia extrema. En caso de robos u otras acciones cotidianas en el modo de vida de los usuarios, acompañar la intervención con acciones educativas.

También recordar que la sanción no debe impedir completamente una tarea terapéutica o sanitaria. Se debe seguir manteniendo la relación, por otros medios y en otros ámbitos. Ni que sea atención en la calle. Especialmente una sanción larga puede impedir la continuidad de un tratamiento.

No puede ocurrir que una persona sea expulsada de todas los servicios asistenciales de su zona de acceso. Esta expresión “expulsado de todos los servicios, de todos los centros” debería desencadenar una situación de alarma que llevara a un estamento por encima de los centros y analizar la situación de esa persona para detectar y prevenir daños en esa misma persona u otras.

Debería haber un grupo de bajo umbral que mantuviera el contacto con esa persona en cualquier caso. De la misma manera que siempre una persona acusada tiene derecho a un abogado, un paciente a un médico, una persona atendida en la red sanitaria-social debería tener algún equipo que mantuviera el contacto.

  1. Decorte T. Quality control by cocaine users: Underdeveloped harm reduction strategies [Internet]. Vol. 7, European Addiction Research. Eur Addict Res; 2001 [cited 2021 Jan 15]. p. 161–75. Available from: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/11752847/
  2. Mino A. [New drug policies: the Geneva example]. Psychiatr Enfant [Internet]. 1994 [cited 2021 Jan 31];37(2):577–99. Available from: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/7878141
  3. Monroe T, Kenaga H. Don’t ask don’t tell: Substance abuse and addiction among nurses. J Clin Nurs [Internet]. 2011 Feb [cited 2021 Jan 13];20(3–4):504–9. Available from: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/21040041/
  4. Broers B, Giner F, Dumont P, Mino A. Inpatient opiate detoxification in Geneva: Follow-up at 1 and 6 months. Drug Alcohol Depend. 2000 Feb 1;58(1–2):85–92.
  5. Petersson FJM. Excusing exclusion: Accounting for rule-breaking and sanctions in a Swedish methadone clinic. Int J Drug Policy. 2013;24(6).
  6. Duncan T, Sebar B, Lee J, Duff C. Social & Cultural Geography Mapping the spatial and affective composition of care in a drug consumption room in Germany. 2019 [cited 2021 Jan 30]; Available from: https://doi.org/10.1080/14649365.2019.1610487
  7. McNeil R, Small W. “Safer environment interventions”: A qualitative synthesis of the experiences and perceptions of people who inject drugs [Internet]. Vol. 106, Social Science and Medicine. Elsevier Ltd; 2014 [cited 2021 Jun 10]. p. 151–8. Available from: /pmc/articles/PMC4133147/
  8. Clúa García R. Director Aurelio Díaz Fernández. Tesis doctoral ¡Apúntame a la sala! 2016. Pgs 357-359.

Cuidados de enfermería y promoción de la salud en las salas de consumo higiénico

https://www.researchgate.net/publication/353453189_Cuidados_de_enfermeria_y_promocion_de_la_salud_en_las_salas_de_consumo_higienico
Rafael Clúa se ha convertido en un autor imprescindible para el estudio de las drogas en España, gracias a su continuada producción, compatibilizada con tantas otras tareas asistenciales y docentes. Muy reveladora la descripción del trabajo de enfermería en atención a consumidores de sustancias no prescritas que resulta un buen recordatorio para quienes lo conocen y esclarecedor para quienes no están familiarizados en ese ámbito.

Suport. No Càstig

Xènia Ortiz, Use Expósito. Fundació Àmbit Prevenció

El dia 26 de juny és un dia on els governs d’arreu del món mostren els avenços relacionats amb les polítiques repressives cap al tràfic de drogues, oficialment és el Dia Internacional de la Lluita contra l’Ús Indegut i el Tràfic Il·lícit de Drogues. És una expressió que impulsa l’acció i la cooperació per aconseguir una societat sense drogues. Arrel d’aquesta jornada, el 2013, sorgeix una acció global des del Consorci Internacional sobre Polítiques de Drogues (IDPC), que reivindica i promou la reducció de danys i els drets humans, creant la campanya “SUPPORT, DON´T PUNISH ”. És el dia en què les organitzacions i entitats sensibilitzades amb les persones que usen drogues fem visible la criminalització de les polítiques dels governs cap a aquestes mateixes. 

 Una societat inclusiva és aquella capaç de mirar a tots els ciutadans i ciutadanes, entendre-les, comprendre-les i donar-los suport en les diferents realitats que viuen. Sota aquesta perspectiva, respectar les decisions que prenguin, sense que hi hagi prejudicis. No obstant això, quan aquestes decisions passen pel consum de drogues, malauradament s’assumeix conviure amb les violències adherides a les polítiques de drogues, que criminalitzen a la persona consumidora i la posicionen en una situació d’exclusió social. Les polítiques interpreten el consum de les drogues com quelcom il·lícit que s’ha de sancionar o castigar, sense tenir en compte la situació de la persona que usa drogues i les seves conseqüències, ignorant que les persones consumidores de drogues no són víctimes de les drogues, sinó víctimes d’aquesta política de lluita contra les drogues.

Des dels centres de Reducció de Danys es treballa per millorar la qualitat de vida de les persones que usen drogues, respectant el moment vital en el que es troben i les decisions que prenen. Tanmateix, hem de ser crítics i conscients que aquestes polítiques es filtren en les nostres accions, creant un “ells” i un “nosaltres” i, en moltes ocasions, aplicant estratègies socials sancionadores. Com si l’equip de professionals fóssim amos de la moral i l’ètica més objectiva que fa que segurament acabem realitzant judicis i utilitzant eines sancionadores, creant sovint un malestar cap a nosaltres mateixes i mateixos i fent-nos partícips del càstig que el sistema exerceix sobre aquestes persones. Acostumem a mirar a les persones que atenem sense valorar si en aquesta visió hi ha un prejudici, sense fer un primer anàlisi de la nostra tasca.

Parlem de posar el focus en la persona, en les seves habilitats, necessitats, sense criminalitzar l’ús que fa cap a les drogues i sense jutjar les decisions que pren sobre la seva vida. La nostra tasca requereix tenir una actitud crítica, obrir la capacitat de respectar i dignificar a la persona, per tal d’oferir espais per compartir, deixant de parlar de drogues per parlar de persones. Deixant de posar el focus en les drogues, per posar-lo en les persones i les seves vivències.

La campanya SUPPORT, DON´T PUNISH resumeix el paradigma de la nostra tasca fent difusió de la problemàtica que comporta aquesta pressió política i promovent un canvi de perspectiva, de paradigma, i d’accions que no criminalitzin a les persones que usen drogues sinó que aportin solucions efectives.

 

Si tienes 11€, alguien dormirá a cubierto

El programa LITS se inició en 1996. Consiste en la contratación de camas en una pensión convencional para alojamiento de personas consumidoras de drogas. Aparece de la dificultad de los usuarios de drogas ilegales, en situación marginal, para acceder a pensiones o albergues, debido a que a menudo los criterios de acceso a los servicios generales de salud y de ayuda social exigen precisamente el no consumo de drogas.

En 2008 tuvimos las oportunidad de hacer una amplia revisión (1) del desarrollo del programa. Lits 2008. Hospitalización en pensiones / Lits 2008. Hospitalitsation in boarding-houses. Available from: https://www.researchgate.net/publication/323244074_Lits_2008_Hospitalizacion_en_pensiones_Lits_2008_Hospitalitsation_in_boarding-houses

El fuerte desarrollo del turismo con un mayor precio de las habitaciones de las pensiones y la crisis de los servicios sociales nos hizo perder este recurso.

Nuevas oscilaciones del turismo. En 2021, se abaratan las habitaciones de pensiones y “hostels” de Barcelona y hay plazas libres. Con 11€ se puede contratar una habitación. Si tienes 11€ alguien podrá domir a cubierto.

(1) Lits 2008. Hospitalización en pensiones / Lits 2008. Hospitalitsation in boarding-houses. Available from: https://www.researchgate.net/publication/323244074_Lits_2008_Hospitalizacion_en_pensiones_Lits_2008_Hospitalitsation_in_boarding-houses

Cirugía de Afirmación / Confirmación Sexual

Trinidad Labanca, especialista en Salud Transgénero y cirugía de afirmación sexual 

Buenos Aires

 

Las personas transgénero pueden optar por realizar procesos de afirmación/ confirmación sexual basándose en sus propias necesidades corporales; dichos procesos son conocidos como “transición”. La extensión de la transición es muy variable: algunas personas pueden no transitar en absoluto; para otrxs la transición social es suficiente, utilizado técnicas como el “truqueo” – para las mujeres trans- (lo que hace referencia a la introducción de ambos testículos dentro del canal inguinal, resultando en muchas oportunidades doloroso e incluso poniendo en riesgo la vasculatura testicular), o el “binding” -para los hombres trans- (que consiste en técnicas diversas para ocultar los pechos, resultando en opresiones torácicas, dolores extremos e incluso compromiso de la piel del tórax); otrxs pacientes pueden requerir tratamiento hormonal y/o tratamiento quirúrgico para masculinizar o feminizar sus cuerpos.

 

Cirugías para feminizar los cuerpos

Mujeres trans

Si nos referimos a los tratamientos quirúrgicos, las opciones para feminizar los cuerpos para las mujeres trans incluyen: feminización facial –utilizando técnicas quirúrgicas como el avance de la línea capilar, el borramiento de los arcos supraciliares, o la colocación de prótesis mentonianas para avanzar y afinar el mentón-; la feminización corporal -utilizando técnicas como la lipoescultura y el transplante de tejido graso-; la mastoplastia de aumento –utilizando prótesis mamarias-: y la tiroplastia –técnica quirúrgica que consiste en el limado del cartílago tiroides, con la finalidad de disminuir su protuberancia, coloquialmente conocida como la “Nuez de Adán”.

La cirugía de afirmación sexual genital para mujeres trans se denomina vaginoplastia, y consiste en la labración de un canal vaginal que permita relaciones sexuales, reposicionamiento del meato uretral, clitorolabioplastia, y la eliminación de estructuras anatómicas como los testículos y el falo. En la vaginoplastia por inversión peneana, se utiliza la piel del pene desepitelizado para cubrir el canal vaginal, el clítoris es reconstruido con una porción del glande, los labios menores con el prepucio, y los labios mayores con piel del escroto. Otras técnicas de vaginoplastia descriptas en la bibliografía pueden incluir la interposición de un asa intestinal de recto-sigma para cubrir el canal vaginal. Cualquiera sea la técnica quirúrgica empleada para una vaginoplastia, luego de la misma se requerirán lavados y dilataciones vaginales periódicas con la finalidad de mantener un calibre y longitud vaginal que posibilite la cópula.

En contrapartida, algunas mujeres trans buscarán recrear una estética vulvar femenina en apariencia, sin tener deseo de penetración vaginal ya que no utilizan la vagina como órgano sexual. Para aquellas mujeres, considerando las potenciales complicaciones que entraña la creación de un canal vaginal localizado entre la vejiga y el recto, y sumado a la implicancia respecto a dilataciones vaginales diarias y periódicas en el postoperatorio luego de una vaginoplastia, se puede ofrecer una vulvoplastia. La vulvoplastia es la cirugía mediante la cual se recrea una vulva femenina, con el clítoris, labios menores y labios mayores, y se adecúa la uretra en un tamaño y localización femenina. Dicha técnica quirúrgica no habilitará a la paciente a mantener relaciones sexuales vaginales ya que no se realiza un canal vaginal. La elección de una u otra técnica es indiscutiblemente elección de la paciente, y se regirá según sus propias expectativas y deseos, sin desestimar la imposibilidad de penetraciones vaginales luego de la segunda. La diversidad sexual en todas sus formas es tan extensa que no deberíamos considerar la heterosexualidad con relaciones sexuales frontales como norma.

 

Cirugías para masculinizar los cuerpos

Hombres Trans

En el caso de los varones trans, las cirugías más comúnmente demandadas son la masculinización facial –utilizando técnicas quirúrgicas que impliquen la colocación de prótesis maxilares y/o mentonianas-; la masculinización torácica -la cual consiste en la reconstrucción torácica mediante una mastectomía bilateral, la remoción de exceso de piel, y la relocalización de complejo areola pezón en un sitio anatómico masculino (idealmente a 1 cm por encima del borde inferior del músculo pectoral mayor, y a 2-3 cm interno a la línea imaginaria axilar anterior)-.

Si nos referimos específicamente a la cirugía de afirmación sexual genital, la faloplastia y la metaidoioplastia, son las opciones para los hombres trans. La faloplastia consiste en la creación de un falo utilizando injertos o colgajos de tejidos aledaños. El colgajo libre radial es la técnica de elección para las faloplastias, donde se utiliza la piel y la grasa del antebrazo para recrear un falo con una uretra cutánea “técnica descripta como tubo dentro de tubo”, y se anastomosan los vasos y nervios del colgajo radial a la vasculatura e inervación de la zona genital. El resultado final será un falo estéticamente masculino, pero sin posibilidad de erección. Para su erección se requerirá la colocación de prótesis peneanas. Últimamente, se comercializan con frecuencia prótesis peneanas específicamente diseñadas para hombres trans. A su vez, en un tiempo posterior, se pueden colocar prótesis testiculares, confeccionado con la piel de los labios mayores, una bolsa escrotal que pueda albergarlos. Por último, es de importancia recalcar que la prolongación de la uretra femenina con una uretra cutánea (realizada con piel de antebrazo con la técnica descripta de “tubo dentro de tubo”), no está excenta de complicaciones, dentro de las cuales la fístula es la más prevalente y casi condición luego de tal procedimiento.

En cuanto a la metoidoioplastia, la misma es una cirugía que busca elongar el clítoris – previamente aumentado de tamaño por acción de la testosterona y estimulado con cremas locales y/o succión- mediante la sección de su ligamento suspensorio. La metaidoioplastia requiere, además, la elongación de la uretra femenina, utilizando tejido de labios menores y/o mucosa bucal para tal fin. Engendra generalmente menor gravedad de complicaciones si la comparamos con la faloplastia, pero el resultado final será el de un micropene con escasa a nula capacidad penetrativa. Se pueden, en segundo tiempo, colocar prótesis testiculares previa labración de bolsa escrotal utilizando el tejido de los labios mayores como bolsa escrotal.

Siguiendo la lógica de pensamiento que prima la autonomía corporal y contempla la diversidad sexual y corporal, la elección de una u otra técnica quirúrgica es indiscutiblemente elección del paciente, entendiendo que ambas son técnicas complejas, no exentas de complicaciones incluso -en manos muy entrenadas-, y que si se opta por la metaidoioplastia, el paciente no tendrá posibilidad de penetrar una vagina estándar (aproximadamente 7-15 cm). Por contrapartida, si el paciente solicita una faloplastia, debe ser conocedor de sus costos en términos económicos (ya que las cirugías y sus prótesis son caras); de sus potenciales complicaciones  -como lo son la posibilidad de pérdida del injerto (necrosis del falo), fístulas uretrales o cutáneas, entre otras; y de sus principales limitaciones, como lo son la necesidad de diferentes tiempos quirúrgicos para colocar prótesis peneanas y/o testiculares, y la nueva sexualidad que será resultado de estimulación directa de prótesis especialmente diseñadas para penetrar.

 

Conclusión

El amplio abanico que incluye la diversidad poblacional contempla un sinfín de variantes corporales anatómicas, físicas, sociales (de rol) y sexuales.

Que la heterosexualidad monogámica y con determinadas prácticas sexuales tradicionales sea lo estadísticamente más frecuente en la población mundial, ha dado pábula a la idea de que es lo “normal”. Sin embargo, en los últimos años estos conceptos tradicionales y errados han ido tomando forma de retrógrados y discriminativos, apareciendo nuevas sexualidades, nuevas corporalidades y nuevas prácticas sexuales que han puesto en tiembla dichas creencias populares, sumadas a las voces del activismo que bogan por los derechos y recursos de las personas LGTBIQA+ alrededor del mundo.

La necesidad imperiosa de no juzgar ni criminalizar y contemplar la totalidad de las corporalidades, considerando a la diversidad sexual y corporal en el marco de los principios de autonomía, justicia social, de beneficencia y de no maleficencia, ha dado lugar al crecimiento de cirugías de modificación corporal demandadas por lxs pacientxs. Es de esperar que las técnicas evolucionen, incluso, a contemplar la posibilidad de recrear, en unx mismx paciente, ambas anatomías sexuales. ¿ Quiénes somos los médicos para juzgar/autorizar dichas prácticas quirúrgicas?

 

Me muero de frío

https://blogelciervo.com/

Me muero de frío

Me muero de frío, en Barcelona, no es una expresión para enfatizar sobre bajas temperaturas. Es un relato literal de la muerte de dos personas la noche del 10 al 11 de enero y de a los pocos días la tercera muerte.

Que no distraigan nuestra opinión con la idea de que hay personas que no quieren ir a un albergue. Dos educadores de calle de la Fundación Arrels lo cuentan con claridad y comentan los errores en torno a esta cuestión.

“Error es que el criterio para activar la operación frío sea un grado arriba o abajo de temperatura. O abrir los albergues a las ocho de la tarde, cuando es de noche y los sin techo ya están acostados. Error es pensar que para dormir unas noches en un albergue alguien se alejará del espacio donde tiene sus cartones, de los vecinos que le ayudan, el bar donde puede cargar el móvil o ir al baño, o la tienda que le guarda las mantas”.

Son demasiados años aceptando que la política social de invierno la marca el termómetro. Solo a  determinados pocos grados se ponen en marcha recursos adicionales. Y no ha sido ni siquiera un tributo a esas muertes un cambio de actuación.

Qué debe pasar por la mente de las personas que toman decisiones para aceptar estas muertes y las que vendrán los años venideros. En nuestra querida Barcelona se muere de frío. Y hay que decirlo las veces que haga falta, para que algún día no ocurra. En nuestro entorno de hospitales, hoteles, polideportivos, cuidados intensivos, medicamentos muy caros, depurada tecnología se muere de frío.

La parroquia de Santa Anna, en el kilómetro 0 de Barcelona, aumenta el número de acogidos que dejan la calle. Hay que, también decirlo, para potenciar nuevas iniciativas.

Los educadores de Àmbit Prevenció lanzan un manifiesto de “desacuerdo y malestar sobre cómo se ha gestionado, en la ciudad de Barcelona, la Emergencia Social de la Ola de Frío. No hay  recursos reales para poder ofrecer a las personas en la calle y los que existen, se alejan de sus necesidades”

“La epidemia de COVID  ha ocasionado a las personas que viven en la calle un aislamiento progresivo con el cierre de muchos recursos, han mermado, de manera considerable, su salud física, mental y su estado anímico. Es inaceptable que en un estado de bienestar siga muriendo gente en la calle”.

Barcelona tiene el corazón frío.

Apuntes para un master no reglado de drogas. Bibliografía imprescindible. “La gestión de placeres y daños”

 Rafa Clúa. La gestión de placeres y daños: Estudio etnográfico sobre el consumo de drogas en vía pública, viviendas y salas de consumo higiénico

July 2020
Salud Colectiva 16:e24

Rafa Clúa-García  en su artículo “La gestión de placeres y daños: Estudio etnográfico sobre el consumo de drogas en vía pública, viviendas y salas de consumo higiénico” comenta que “a pesar del despliegue de programas e intervenciones de reducción de daños, los usuarios de drogas continúan manteniendo prácticas de riesgo con consecuencias negativas para la salud y padeciendo discriminación y estigmatización en el marco de las políticas prohibicionistas”.

En él da unas pinceladas de la historia de las salas de consumo en Barcelona y describe las características del consumidor. Mayoritariamente hombres, 80%, lo que da idea de la necesidad de un análisis de los dispositivos de consumo para mujeres, desde las mujeres.

Otro concepto muy importante y que motiva el artículo es, según afirma Rafa, que a pesar de que las evidencias muestran que las salas de consumo pueden contribuir a mejorar la salud y las condiciones sociales de los usuarios, se continúa consumiendo en
espacios clandestinos e insalubres en vía pública y viviendas que son importantes en la ritualización del uso de sustancias, donde se experimentan altos riesgos y daños sociales y de salud.

El autor propone diversas sensaciones en torno al consumo en la calle

  • “Consumir en la calle es sensacional” Sin embargo, según Clúa, los espacios de consumo en vía pública representan los lugares con alto riesgo de contraer infecciones de transmisión sanguínea (VIH y hepatitis B y C) y sufrir sobredosis o reacciones adversas del consumo de drogas.
  • “Consumir en la calle es peligroso”.

De querer promover un consumo seguro en la calle, las recomendaciones recogidas por el autor serían intentar conseguir “un lugar tranquilo para consumir en compañía y alejados de miradas de vecinos y transeúntes”

Respecto a las sobredosis, se gestionan el consumo de drogas evitando cantidades de sustancia que produzcan sobredosis u otros efectos adversos.

Consumo en viviendas

– Las casas particulares son los espacios menos frecuentados por los usuarios dado que muy bajo porcentaje vive en este tipo de viviendas.

– Las casas okupas son espacios frecuentados por grupos extensos de consumidores, más o menos organizados.

– En los pisos de venta de de drogas, existen diferencias en el tipo de vivienda entre los diferentes barrios estudiados. En el centro de la ciudad de Barcelona, se detectan pisos en condiciones de infravivienda organizados exclusivamente para vender y consumir, donde se reúnen pequeños grupos de consumidores. En barrios periféricos o en el extrarradio de la ciudad, se detectan viviendas en las que se diferencian los espacios para la vida doméstica de los espacios para la venta de drogas. En este tipo de viviendas solo se permite el consumo a usuarios de confianza, sin concentración de grupos extensos.

Cita el autor un informe sobre consumo de drogas en la ciudad de Barcelona, que refiere que el 73% de las muertes por sobredosis suceden en viviendas y el 75% son por consumo de heroína, detectándose una creciente presencia de más de dos sustancias

Buprenofrina prescrito por enfermería

Susanne A Fogger 1Kathleen Lehmann

Recovery Beyond Buprenorphine: Nurse-Led Group Therapy

doi: 10.1097/JAN.0000000000000180.

En este artículo las autoras destacan el alto número de sobredosis por opioides en Estados Unidos, superando las muertes por HIV en la década de los 90.

Dentro de las medidas para hacer frente a estas muertes se ha propuesto desarrollar por  personal de enfermería tratamiento con medicamentos como buprenorfina  y liderar terapias de grupo conducidos por personal de enfermería. Focalizadas en desarrollar hábitos que  van a ser necesarios en el recorrido hacia la disminución o cese de consumo de sustancias adictivas.

Se plantea que buprenorfina sola o asociada con naltrexona crea un estable entorno neuroquímicos en el cerebro del paciente que puede disminuir las ganas de consumir y la sensación de placer relacionada con el consumo de opioides.

Y también destacan que evita tener que a acudir a los mercados ilícitos de opioides, con los riesgos que implican

La oportunidad de compartir

Sería deseable que el acceso a medios y recursos derivara de la equidad y la justicia social. Algunas personas muy convencidas no ven otra alternativa.

Pero compartir además de un fenómeno progresivamente aceptado en desplazamientos, residencias, es una oportunidad.

El reciclado se halla también en esta línea. La voluntad que determinados elementos de papel, vidrio, plástico tengan una nueva utilidad. Y también tiene arraigo compartir libros, ropa, enseres, que pueden haber sido muy queridos, pero que ya no se puede conservar más.

Cabe conciliar la organización de estos  elementos a compartir. Y se desarrollan com método los bancos, ya no de dinero, sino de alimentos, ropa y, con numerosas limitaciones, de medicamentos.

También de cosas intanglibles. Como el tiempo y habilidades. Se entrega tiempo y se trueca un determinado saber hacer. La voluntad colectiva de compartir existe. A menudo se busca el rigos y la buena organización.

Para las necesidades de la población, para cada una de ellas, existen excedentes en otros sectores. Complejo articular el trasvase. Pero es bueno que exista esta concienciación más alla del integrismo de la justicia social y las administraciones como única medida.

Recientemente está apareciendo el banco de talento. Personas con conocimientos de idiomas, informática, materias escolares que los ponen al servicios de quienes no los tienen y desena tenerlos.

En los próximos tiempos, a corto plazo, habrá que seguir el banco de profesionales, que ofrecen su tiempo libre a otras personas su propio profesionalismo. De entrada ya existen experiencias de bancos de atención sanitaria, sorprendentes en sociedades con casi sanidad universal, probablemente dirigido a esos grupos que determinan el casi